Un gran porcentaje del comercio internacional tiene lugar entre compañías vinculadas, generalmente empresas multinacionales que transfieren bienes o servicios entre varias unidades de negocio controladas por ellas, que tienen su sede en diferentes países.

Cuando estas unidades de negocio obedecen a una estrategia comercial común, se pueden planificar operaciones para localizar la fuente de la ganancia en las jurisdicciones fiscales con la menor presión fiscal, evitando que los beneficios se generen en los países con los impuestos más altos.

El precio de transferencia se refiere al precio que las entidades no pertenecientes a la cadena de distribución, situadas en diferentes jurisdicciones, se cobran mutuamente por bienes y servicios. Las normas fiscales relacionadas con los precios de transferencia son complejas y los gobiernos son cada vez más proactivos en la evaluación de las políticas y prácticas de precios de transferencia. Las auditorías gubernamentales de las actividades de fijación de precios de transferencia pueden llevar mucho tiempo y ser estresantes, y las sanciones por infringir las normas sobre precios de transferencia pueden ser importantes.

Nuestros profesionales en precios de transferencia globales lo ayudan a desarrollar políticas que maximizan el potencial para aumentar sus ingresos después de impuestos, mientras minimizan la probabilidad de que esté sujeto a ajustes y sanciones fiscales.